En España, el principal impuesto que afecta a los ingresos en función del salario es el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Este impuesto es progresivo, lo que significa que a mayor ingreso, mayor es el porcentaje que se paga en impuestos. La cantidad exacta de impuestos que se pagan varía dependiendo de los tramos de renta establecidos en la escala del IRPF y de las deducciones personales y familiares que puedan aplicarse.
Además del IRPF, existen otros impuestos que pueden influir en la economía de una persona, aunque no dependen directamente del salario, como el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) en bienes y servicios, o cotizaciones sociales que se deducen del salario bruto para financiar la seguridad social.
Por tanto, en función del salario, los principales impuestos que se pagan directamente son el IRPF y las cotizaciones sociales, ambos con tarifas que varían según los ingresos y circunstancias personales.